Cai´rnaval

Antes de llegar a tu destino,
debes de organizar todo muy bien,
que en el camino, sigas el sendero,
sabiendo donde empieza y donde termina,
aunque a veces, puede que pierdas un avión,
que no llegues al tren, y que un coche
entre unos y otros tengas, que coger.

Mas si llegas sin problema,
siguiendo las señales e indicaciones,
seguro que llegas al panel final:
un piso en el centro del cai´rnaval.

Seguro que las risas están garantizadas,
además de chirigotas, canturreos,
besos y abrazotes por vernos,
puede que alguno, por el ansía de disfrutar
llame al vecino de abajo,
se emborrache de compañía
y tenga que ir al balcón,
y mostrarle el disfraz de blancator,
(el de pared blanca en la cara)
el corredor de fondo,
del baño a la terraza…

y cuando las risas están garantizadas,
el aroma de Erasmus nos envuelve
tomando cazón de playita,
cervecita y paseo por la Viña
por supuesto con buena compañía.

Aunque lleves unas "Nike capitán"
y dirijas la concordia,el espíritu setentero,
esta en la plaza y sus calles
y especial en la calle “to the fingers”
el buenrollismo nos acompaña
cantando:

“meten barriga, mueven el culo
y nunca sueltan, el vaso tubo”